Lo bello y lo siniestro

La belleza es una apariencia y un velo que escamotea nuestra visión de un abismo sin fondo y sin remisión en el cual cede toda visión y se resquebraja todo efecto de belleza. Una de las condiciones estéticas que hacen que algo sea bello es su capacidad por revelar y a la vez esconder algo siniestro.
Por tanto la belleza se asienta sobre lo siniestro, velándolo y desvelándolo a la vez.